Comienzo escribir este artículo aún en estado de shock por lo ocurrido el pasado domingo 15 de Febrero en Venezuela. Pero no por los resultados de la votación de la enmienda constitucional. ¡No!, ¡Eso es lo menos importante! Estoy impactado por lo que presenciamos los venezolanos ese día: Vimos en pantalla, entre otras cosas, al Sr. Iván Simonovich, preso político del presidente de la república, ejercer su derecho al voto custodiado por un grupo armado de la policía política del régimen. ¡¡SANTO DIOS!!! ¡¡Cuánta injusticia y burla a los DERECHOS HUMANOS encarna este hombre que aún hoy no ha sido procesado por un supuesto delito que se le imputa por los sucesos de abril de 2002! No tienen argumentos jurídicos para enjuiciarlo, pero tampoco quieren liberarlo. Simplemente le dan largas al asunto y mientras tanto, lo mantienen pudriéndose en la cárcel, sólo para satisfacer a Chávez. ¡Cuánto oprobio! ¡Algún día los responsables de semejante desafuero tendrán que responder ante la ley por esto! ¡Larga vida al Sr. Chávez!
Luego vimos con estupor y asombro, cómo una anciana venezolana de más de 70 años, era detenida por haber cometido un supuesto delito electoral al reclamar que la boleta electoral no había reflejado su opción elegida y por supuesto se negaba a depositar la boleta nula en la urna correspondiente como le exigían los miembros de mesa. Según parece, en un confuso incidente, la boleta resultó rota y a la señora en cuestión se la llevaron presa cual vulgar ladrón. Por insistencias de testigos presenciales fue liberada horas después. Por supuesto, a la anciana en cuestión no se le permitió repetir el acto de votación. ¡No faltaba más!
Sin embargo, al gobernador de Anzoátegui Tarek Saab lo vimos romper, ante las cámaras de televisión y con una sonrisa en los labios, la boleta electoral lo cual conforma un delito electoral que se castiga hasta con tres años de prisión. No conforme con tamaña irregularidad, el presidente de esa mesa le permitió al “poeta de la revolución”, votar por segunda vez sin llenar el procedimiento que ordena la ley. Por si esto fuera poco, vimos al susodicho ejercer su derecho al voto cargando en sus brazos a un niño de... ¿cuántos meses podría tener ese bebé? Yo le calculo entre 72 y 84 meses. ¡Caramba! ¡Qué difícil se me hace calcular los meses de ese niño que Tarek llevaba en sus brazos! ¿O sería que Tarek estaba aprovechando para realizar sus ejercicios de halterofilia que no pudo hacer antes por estar ocupado en la votación? ¡Menos mal que no se le ocurrió llevar a un bebé de 15 o 16 años de edad y cargarlo ante las cámaras de televisión! Yo no quisiera pensar, como sugieren algunos, que tan lírico personaje estuviera de pantallero y utilizando al infante para su proyección personal ante las cámaras de televisión en clara violación a lo contemplado en la LOPNA.
Posteriormente, en horas de la tarde presenciamos a ese inefable personaje que es Jorge Rodríguez recomendarle con sorna y en forma francamente burlesca beber guarapitos de hojas de tilo a la gente de la oposición en momentos que declaraba a Telesur indicando claramente la tendencia de la votación en evidente violación a las normas de ese poder público soberano e independiente, tan dado a complacer los deseos y caprichos presidenciales, que es el CNE.
Minutos después escuchábamos las declaraciones a Telesur de esa otra conspícua figura del chavismo radical y aprovechador sin igual de las bondades de 10 años de gobierno revolucionario bolivariano, que, con su hablar suave y pausado pero definitivamente amenazador decía que “ellos sí iban a cobrar por su triunfo”. “Que no pensáramos que ellos iban a triunfar en las votaciones y se iban a quedar tranquilos, como si nada hubiese pasado”. Y repetía: “nosotros sí vamos a cobrar y vamos a profundizar en el camino que nos hemos trazado”. Me refiero a Diosdado Cabello, de quien se dice que el presidente lo puso de nuevo al frente del MINFRA para sustraerlo de cualquier investigación que se le pudiera hacer a su administración como gobernador del estado Miranda.
¡Esta gente actúa como si el pueblo venezolano les hubiese extendido un cheque en blanco! Por cierto, ¿conocen los chavistas la mansión-fortaleza que se construyó este señor en los Altos Mirandinos? ¡Qué malo es ser rico! El que quiera confirmar semejante afirmación emitida por el prócer viviente de Sabaneta, que se lo pregunte al Sr. Cabello.
Para terminar con este triste día, momentos después de que el CNE hubiese informado al país los resultados de la votación oíamos decir al Sr. Chávez esta perla: “Este soldado se declara desde ya pre candidato presidencial para elecciones del año 2012 para gobernar al país en el período 2013-2019”……¿Qué tal?
Eso es lo que sacó en blanco el Sr. Chávez: después de una multimillonaria campaña donde hubo todo tipo de chapucerías, chantajes, ventajismo, mentiras a granel, manipulación y engaño a la gente que confía aún en él, dispendio desmedido de los recursos del estado, ofensas y amenazas al estudiantado venezolano y un montón de otras cosas que sólo se ven en un gobierno déspota y dictatorial como el gobierno del héroe del museo histórico militar de La Planicie, Chávez se aseguraba la oportunidad de permanecer en el poder por tiempo indefinido.
Eso era todo lo que quería Chávez. Esto era lo único que le importaba. Asegurarse que podía optar nuevamente al cargo de Presidente de la República. Para esto no dudó en apelar a cualquier medio para lograr sus metas; así como tampoco se ahorró ningún gasto del dinero de los venezolanos; como tampoco dudó en usar todos los recursos oficiales que maneja a su antojo gracias a la desvergüenza y sumisión de los poderes públicos y sus eximios representantes.
Después de gritar desaforadamente que quería aplastar a la oposición y de exigirle a sus adláteres el máximo esfuerzo en aras de lograr sus ansiados objetivos, finalmente logra la victoria en una contienda desigual y donde jugó con todas las cartas a su favor. ¡Tremenda victoria de enmienda que logró el Sr. Chávez ¡ ¡Tanto dinero derrochado, tanto esfuerzo invertido, tantas horas-hombres malgastadas en la preparación de sus actividades de campaña, tanto tejer mentiras y amenazas a los trabajadores que dependen de los organismos oficiales! ¡¡Con un poder tan inmenso y sin parangón en la historia venezolana, apenas lográ aglutinar tras de sí a un tercio de la población electoral de Venezuela!!. ¿Tanto derroche de recursos para este pobre resultado? Entonces, podemos afirmar que el presidente logró una victoria de enmienda. ¡Hasta él, vayan pues, nuestras más sinceras felicitaciones por semejante muestras de arrastre popular!
Hoy, Chávez y los suyos deben estar festejando ¿alborozados? tan aplastante victoria electoral. Pero deben estar festejando solos. No se percibe alegría en el colectivo venezolano. Por el contrario, se nota en la cara de la gente un aire de desilusión, de desconsuelo, de tristeza. ¡Y Chávez debe saberlo! ¿Con cuál sector de la población festejó Chávez anoche asomado a lo que él llama el “balcón del pueblo”? Chávez debe saber que la mayoría del pueblo venezolano no festejó. Debe saber que la mayoría del pueblo venezolano no compra su proyecto político. Venezuela sabe que Chávez basa su fortaleza en el odio y en la ignorancia de la gente que le sigue. Chávez ganó simplemente por los recursos financieros de que dispone. Chávez juega al dicho que reza “BILLETE MATA GALÁN”, ¡Y está muy consciente de esa verdad ! La gente que lo rodea y le aplaude todo lo que diga, lo hace sólo porque así se asegura una forma de vida cómoda y regalada a la sombra del Gran Piache. El pueblo se refiere a esta gente con el calificativo de LAS FOCAS. Por lo tanto cabe preguntarse: ¿QUÉ CELEBRA CHÁVEZ?